¡Hola happy workers!
Muchos de vosotros nos habéis escrito para contarnos que, después de la Diada de Sant Jordi y del Día del libro, estáis leyendo el www.libroworkinghappy.com. Estoy encantada de que esté en vuestras manos porque es la recopilación de un montón de casos, trucos, estrategias... para tener una empresa más saludable, y lo escribí con muchísimo cariño para que os acompañe cada día.
Una de las lecciones del libro es que no hace falta vender. ¡No, en serio, no hace falta! Porque vender –a secas– no mola. Para nada. Es cansino, es como hacer spam, aburrido y, sobre todo, parece que estés necesitado. Como si estuvieras mendingando.
Y es que a la gente le encanta comprar cosas, pero odia que le vendan.
Por eso nosotros no vendemos, sino que hacemos marketing.
“¿Y cuál es la diferencia?” – te preguntarás.
Te pondré un ejemplo para que lo veas más claro. Antes de tener la empresa, yo tenía un trabajo fijo pero había mucha gente que venía a mí porque quería contratarme. ¡Pero si ni siquiera tenía página web ni me había anunciado en ninguna parte!
¿Qué pasaba? El boca-oreja funcionaba. Mi trabajo hablaba por sí solo y llamaba la atención de una manera que conseguía conectar con la gente muy muy adentro (como yo digo, les llegaba a la patata jajajaja). Recuerdo un e-mail de esa época de una chica que no conocía de nada y me escribió algo así como: “No sé qué tienes que me has impactado y estás cambiando mi manera de hacer negocios. Y quiero más”. ¿Te imaginas? ¡La gente quería contratarme y ni siquiera era autónoma ni me había anunciado en ningún lugar! ¡No vendía nada, pero querían comprarme, emocionados! Mi mensaje les había llegado.
A día de hoy, en nuestra empresa, seguimos la misma filosofía y no tenemos a un comercial que vaya puerta a puerta. Lo que hacemos es aportar valor, compartir nuestro conocimiento y estilo de vida, intentar ser una inspiración: vídeos, artículos… (el llamado marketing de contenidos). No queremos vender, queremos enamorar con nuestra persona y mensaje de una manera natural, preocupándonos realmente por nuestros seguidores y su bienestar. Somos embajadores de nuestra propia marca.
Resumiendo, te proponemos un estilo de “venta” totalmente distinto: no desde la necesidad, sino desde la inspiración y la emoción, motivado por la pasión por lo que haces.
Este es el tipo de marketing que hacemos y que enseñamos a nuestros clientes. No se trata de actualizar las redes sociales sin más, es muchísimo más profundo: se trata de tener muy claro nuestro mensaje. No importa si eres coach, instructor de yoga, masajista o diseñador gráfico: necesitas tener muy claro qué tienes que puede inspirar a la gente de tu alrededor, porque eso es lo que te hará destacar (Compártelo en Facebook o Twitter). Este es el mensaje que tienes que compartir.
Y tú, ¿cómo compartes tu mensaje para enamorar a la gente y dejarla con ganas de más, incluso sin hablar de tu producto o servicio? (Compártelo en Facebook o Twitter).
¿Cómo construyes relaciones profundas y reales con tu cliente potencial aportando valor? (Compártelo en Twitter).
Un abrazo,
Txell
PD: Si no tienes respuesta a estas preguntas, estamos aquí.
Vamos a crear juntos un trabajo que te apasione y que te haga ganar dinero, haciéndote sentir bien. Te enseñaremos la parte más práctica -herramientas y estrategias- sin olvidar las emociones, los sentimientos, el alma, porque el éxito llega aunándolo todo, vida y trabajo van de la mano.
No nos gusta el estrés ni la gente obsesionada con el trabajo. No creemos en jornadas laborales maratonianas por norma.
Nos gusta enseñar que es posible crear un negocio feliz, que genere beneficios y que aporte valor a la sociedad, viviendo la vida que queremos vivir.
PD2: Por cierto, si te ha gustado el libro Working Happy. Todo lo que necesitas para crear la mejor empresa del mundo: la tuya, te agradeceré un montón que nos des 5 estrellas en Amazon y, si te animas, tu opinión. Vuestro feedback es muy muy muy útil para la gente que busca una guía y se siente perdida cuando emprende. ¡Gracias!
