Estas últimas semanas nos hemos estrenado en Snapchat y Periscope, las redes sociales de moda para hacer streaming (nos encontraras como @txellcosta). La primera se utiliza para hacer vídeos cortos de 15 segundos y la segunda más largos. En los dos casos, los contenidos se borran a las 24 horas.
En Periscope hemos aprovechado para dar algunas píldoras de conocimiento sobre redes sociales. Te compartimos a continuación algunas ideas clave. Lee hasta el final, porque encontrarás un descargable muyyy suculento.
Paso 1: Haz un diagnóstico antes de entrar al trapo con las redes sociales
Escoger con qué red social trabajar puede ser como escoger la ropa de cada día: ¡un lío! Por eso tenemos que tener claros nuestros objetivos: ¿qué queremos conseguir?
- notoriedad
- que la gente ame nuestra marca
- engagement de los consumidores -en cristiano significa compromiso-
- ventas
Queremos conseguir el objetivo que nos hayamos marcado. Por lo tanto, siempre estamos buscando conversiones: que nuestros seguidores hagan aquello que nos hemos propuesto.
Una buena planificación nos ayudará a tener claras las prioridades.
Paso 2: La estrategia en redes sociales. ¡Con las manos en la masa!
Y una vez tenemos nuestras necesidades estratégicas definidas, debemos dar forma a nuestros mensajes. ¿Cómo tienen que ser? Pues muy flexibles y adaptables, como blandiblu, para que:
- funcionen bien en diferentes soportes. Nuestro discurso no sólo tiene que funcionar en las redes sociales, sino que debemos poder trasladarlo a nuestra página web, pósters, trípticos... sin que pierda frescor o significado. (clica y tuitéalo)
- puedan funcionar en diferentes idiomas, e incluso, para gente de distintas culturas si es necesario (¿imagina que vendes en distintos países: el mensaje se entenderá cuando se traduzca? ¿o contiene giros lingüísticos únicos?).
- los seguidores se los hagan suyos y puedan conversar y formar parte de la construcción de marca (¡internet es conversación! Este es el significado de 2.0).
- ofrezcan experiencias, así generaran recuerdo entre nuestros seguidores y nuestra marca estará presente en su cabeza. (clica y tuitéalo)
- tengan forma de historia (el famoso 'storytelling'). Los relatos nos ayudan a comprender mejor las cosas y expanden la potencia de tu mensaje, (clica y tuitéalo) porque lo abstracto no genera imágenes en la mente. En resumen: necesitamos crear imágenes mentales para que la gente recuerde las cosas.
De hecho, a veces pienso que las buenas historias muestran datos pero con alma.
Una gran historia debe ser:
- participativa
- atractiva
- estructurada
- performativa (que viene de performance, o sea, poderlo teatralizar)
- tangible
- (a mí, a título personal, también me gusta que sean divertidas, porque las emociones promouen el recuerdo)
- son fáciles de comprender, teniendo en cuenta las inteligencias múltiples de la gente (hay personas más visuales, otras que comprenden mejor las cosas cuando las practican...): así pues, piensa cómo DICES el mensaje, cómo lo MUESTRAS y cómo lo HACES.
- aporten valor. Internet está plagado de información, pero tu mensaje tiene que ser único. ¿Lo leerías tú, si estuvieras en la piel de tus seguidores?
¡Y ahora te toca a ti!
A continuación encontrarás una plantilla descargable gratis para comprobar que tus mensajes en redes sociales son efectivos y, así, no olvidarte nunca de los pasos anteriores.
Para poder acceder a él, sólo tienes que pinchar en uno de los botones sociales que aparecen a continuación para compartir este artículo. ¡Muchas gracias por colaborar!
Para descargar el checklist clica aquí
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